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Entronizaron en la catedral la Cruz del Señor del Milagro de Salta


En la catedral Nuestra Señora de la Paz, el obispo diocesano, monseñor Jorge Lugones SJ, entronizó la Cruz del Señor del Milagro, una imagen donada por el arzobispado de Salta.

  • 15 Febrero 2018
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En la catedral Nuestra Señora de la Paz, el obispo diocesano, monseñor Jorge Lugones SJ, entronizó la Cruz del Señor del Milagro, una imagen donada por el arzobispado de Salta.

La bendición y entronización de la Cruz la hizo en el marco de la misa del Miércoles de Ceniza, que se celebró ayer para iniciar el tiempo de la Cuaresma.

Al presentarla, monseñor Lugones la definió como “hermosa imagen, histórica, que en el siglo XVIII paró los terremotos en la ciudad de Salta”.

Referencia del obispo a la Cruz y bendición

“Jesús está con rayos, y significa no solo que Cristo está muerto sino que ha resucitado y es glorioso; aquí está la esencia de la Pascua en esta figura, Pascua esperanzadora del Señor resucitado que a todos atrae”, completó.

Todas las fotos de la entronización

Entronización de la Cruz del Señor del Milagro de Salta

Con todos los presentes, el obispo rezó la oración al Señor (y también de la Virgen del Milagro), cuya fiesta es el 15 de septiembre.

Oración al Señor del Milagro
Señor, abre tus ojos y mirame con piedad
y misericordia; hazme ver las cosas de este
mundo con tal indiferencia a que solamente
contemple las tuyas para que te pertenezca
del todo y me salve; guía mi memoria,
entendimiento y mis pasos por el buen
camino a fin de poder llegar un día a tu
santa gloria.Escúchame, Señor nuestro
cristo crucificado.
Abre Señor tus labios y dime que me
perdonas, que me ayudarás a obrar
siempre el bien y saber perdonar las ofensas
que me hagan. Librame, Señor, del mal uso
de la palabra y de las murmuraciones.
Acercame Señor a tu Corazón Santísimo con aquel amor
divino con que abrazaste tu Santa Cruz para salvarnos
y haz que yo también abrace resignadamente mi cruz
dándome humildad, paciencia y fortaleza para todos
los trabajos de esta vida.


(Se pide lo que se desea conseguir)

Y tú, Madre amada del Milagro, pide también a tu Santísimo
hijo que nada puede negarte, todo lo que acabo de suplicarte.
Acógeme bajo tu amparo y protección todos los días de mi
vida y especialmente en la hora de mi muerte. Así sea.

La fiesta de la Cruz del Señor del Milagro de Salta, asi como la Virgen del Milagro, demuestra año tras año que se trata de una de las devociones de fe más tradicionales y convocantes de la Iglesia en Argentina. (Ver historia completa).